¡Dejad a los putos Reyes Godos en Paz!

¡Dejad a Alarico, Recesvinto, Gundemaro o Wamba en paz! ¡Dejad de acudir a ficciones educativas para crear hombres de paja! ¡Olvidaos de citar, desontextualizadamente, a determinados autores por citas que, en muchos casos, resultan ser totalmente falsas atribuciones! ¡Pasad de sacar a pasear a Franco, Hitler o Stalin cada vez que habléis sobre educación! Y, por favor, ¡pensad de una puta vez en el alumnado, los docentes que están en las aulas y las familias!

Sí, si te has sentido aludido por lo anterior es porque me estoy refiriendo a ti. Al que hilvanas discursos miserables y la única opción que ves es crear unicornios, buscar enemigos por doquier o, simplemente, croar como un sapo que jamás va a ser otra cosa que un puto sapo. Un sapo que, por cierto, es tóxico del copón. Mirad lo que pasó con el Nacho Vidal. No, no estoy hablando del Nacho Vidal futbolista. Ese suficiente pena tiene con soportar los continuos chistes por llamarse así.

Lo que debería interesarnos es qué está pasando actualmente en las aulas. El realizar una evaluación sistémica, lo más objetiva y bien diseñada posible, que nos permita tomar decisiones futuras en función de sus resultados. Tomar los datos y las investigaciones y ponernos manos a la obra. Es que gritar o gemir diciendo que ha vuelto el franquismo educativo no tiene ningún sentido. Menos aún para el alumnado que está en nuestras aulas. Especialmente para aquel alumnado más vulnerable que, curiosamente, siempre sigue siendo el gran olvidado en determinados discursos educativos procedentes, supuestamente, de gente que se reivindica como inclusivos de alto pedigrí. Y es una auténtica pena porque, sinceramente, hay mucho trabajo que hacer. Un trabajo para el que me conformaría que esos tipos y tipas cuya única máxima es hablar del pasado y criticar a los que no piensan como ellos, se dedicaran a aportar algo. Bueno, si no aportan nada, como mínimo que no impidan solucionar los problemas educativos. Lo de que sigan dando la tabarra, es algo que es lícito que hagan. Si no tienen otra vida ni otras preocupaciones, pues que disfruten de la visibilidad que las redes les han otorgado.

Necesitamos evaluar. Necesitamos saber qué recursos necesitamos realmente y cómo debemos de distribuirlos. Necesitamos saber qué funciona en las aulas y qué no. Necesitamos saber si el currículo y las materias está bien diseñado o no. Necesitamos tomar medidas para mejorar el clima en el aula. Un clima que mejoraría, tanto la capacidad de los docentes para dar clase como la del alumnado para aprender. Necesitamos rediseñar el modelo de formación, tanto inicial como continuo de los docentes. Necesitamos analizar los motivos por los que hay determinadas empresas que han irrumpido en educación. No me parece mal que haya herramientas tecnológicas ni recursos privados en las aulas. Lo que quiero es que funcionen. Y sé que muchas de esas cosas que se están implantando no funcionan. No lo digo yo. Lo dicen los que más saben de educación en este momento: los docentes de aula.

Yo quiero soluciones para la escuela del 2024. Quiero que esas soluciones afecten positivamente a la escuela del 2025. Quiero que en el 2025 se siga mejorando la escuela del 2024 y que, en el 2026 se mejore la escuela del 2025. Para eso debemos de intervenir en la escuela en el momento en el que estamos. Dedicarnos, como hacen algunos, a hacer discursos basados, tanto en putos Reyes Godos o en modelos futuros que nadie sabe cómo van a ser, es totalmente irracional. Eso sí, permite derivar lo importante y urgente a algo que permite hilvanar ciertos discursos, salir en los medios o darte de guantadas virtuales, abocando tu frustración, en determinados medios. Y eso, salvo a los cuatro que todos sabemos, interesa a cero alumnado de nuestras aulas.

Finalmente me gustaría aclararos que en este artículo no estoy diciendo que no debamos tirar de hemerotecas. Tampoco os estoy diciendo que haya cosas que, por ser un fiasco o un éxito en su momento, no debamos rechazar o readquirir de nuevo. Estoy diciendo que debemos centrarnos en lo que sucede, a día de hoy, en nuestras aulas. Y dejar, entre otros, a los putos Reyes Godos en paz.

Donar

  Nuevo canal de WhatsApp

También tenéis la posibilidad descargaros mis libros en formato digital a partir de cero euros desde aquí. Y recordad que suscribirse al canal de WhatsApp no implica compartir vuestro número de teléfono. Solo implica que vais a poder consultar todos los artículos que publico en este blog por ahí.

Publicaciones Similares

Deja un comentario