Después de haber asistido a clases, claustros, simulacros, reuniones y apagones, TORREZNO 3PO creyó que había alcanzado cierto dominio del funcionamiento educativo terrestre. Error.

Lo supo en cuanto la tutora de 1º de ESO anunció con alegría forzada:

-¡Mañana nos vamos de excursión al museo de ciencias! ¡TORREZNO, te vienes con nosotros!

Él aceptó sin sospechar que lo que se anunciaba como «actividad cultural complementaria» era, en realidad, una odisea logística, emocional y filosófica.

06:48h. Estación de autobuses del centro.

Veintiocho alumnos, tres profesoras, un padre voluntario y un ser intergaláctico disfrazado de auxiliar docente. El caos ya era palpable. Mochilas mal cerradas, desayunos a medio masticar, preguntas repetidas (¿Cuándo llegamos?, ¿Se puede llevar móvil?) y un volumen de decibelios incompatible con la vida humana prolongada.

TORREZNO 3PO detectó un patrón. Cuanto más temprano, mayor la euforia. Un fenómeno que no logró explicar científicamente.

08:13h. Autobús en marcha.

El conductor, resignado a su destino, puso la radio baja mientras los alumnos gritaban, jugaban a golpear cabezas ajenas con cojines y activaban altavoces portátiles con reguetón.

Una profesora intentó imponer silencio con frases como vamos a disfrutar del paisaje o puede marearos el ruido, pero nadie las oyó porque estaban grabando un TikTok.

TORREZNO 3PO activó su sistema de cancelación de ruido. Fue la única decisión sensata del día.

09:32h. Llegada al museo.

La entrada fue triunfal. Uno se cayó al bajar. Otro descubrió que había olvidado la entrada. Dos querían ir al baño urgentemente. El guía del museo, un joven con mirada cansada y chaqueta de pana, comenzó la visita diciendo:

-Bienvenidos. Hoy hablaremos sobre la historia de la energía.

Cinco minutos después, siete alumnos habían desaparecido detrás de una maqueta interactiva, tres preguntaban si eso entraría para nota, y uno le preguntó al guía si esto de los átomos va con religión.

TORREZNO 3PO trató de seguir la explicación, pero se distrajo al observar la escena con mirada de antropólogo…

el guía hablando solo,
los profes vigilando con mirada 360°,
los alumnos posando con esqueletos,
y la tutora preguntándose en silencio en qué momento de su vida todo empezó a salir así.

12:06h. Almuerzo.

Sentados en un parque, los alumnos abrían sus bocadillos como quien abre cofres mágicos. Aparecieron envoltorios misteriosos, termos humeantes, chorizos flotantes y, en un caso extremo, un trozo de tortilla sin protección sanitaria.

TORREZNO 3PO analizó un zumo en brick que, según su escáner, contenía un 0,0003% de fruta.

Un alumno le ofreció una galleta. TORREZNO 3PO, por protocolo diplomático, aceptó. Su sistema digestivo colapsó durante doce segundos.

14:22h. De vuelta.

La energía había caído en picado. Algunos dormían, otros cantaban, una discutía por el cargador. Una profesora corregía exámenes con la expresión de quien negocia un tratado de paz.

La tutora, apoyada en la ventanilla, susurró:

-Esto antes se hacía con ilusión.

Nadie la oyó, salvo TORREZNO 3PO, que archivó esa frase para su informe final.

15:41h. Llegada al centro.

Los padres recogieron a sus hijos entre comentarios como “¿qué tal se ha portado?”, “ha comido poco, seguro”, y “¿había mucha gente?”. Ninguno preguntó qué habían aprendido.

Cuando el último alumno se fue, las profesoras respiraron hondo. Una dijo:

-Pues no ha ido tan mal.

Otra añadió:

-No hemos perdido a nadie, eso ya es un éxito.

TORREZNO 3PO no entendía si eso era ironía o sinceridad. O ambas.

Ya en su nave, escribió el informe: “La excursión escolar no tiene como finalidad principal el aprendizaje académico, sino el entrenamiento emocional en el caos. Sirve para recordar que el aula es una ficción controlada y que, fuera de ella, los códigos se diluyen. Extrañamente, todos repiten la experiencia año tras año. Intuyo que se trata de un rito necesario, aunque nadie sepa bien por qué.”

Antes de entrar en modo reposo, TORREZNO 3PO pensó en que tal vez aprender no se trate de entender, sino de acompañar en el desorden.

Y por primera vez, se sintió menos alienígena.

Lista de capítulos de las aventuras de TORREZNO 3PO

Capítulo I. Un alien en la Facultad de Pedagogía 

Capítulo II. Un alien en la Facultad de Pedagogía II: curso para educadores innovadores

Capítulo III. Un alien en la Facultad de Pedagogía III: observación de un centro educativo real

Capítulo IV. Un alien en la Facultad de Pedagogía IV: el claustro

Capítulo V. Un alien en la Facultad de Pedagogía V: la jornada de puertas abiertas

Capítulo VI. Un alien en la Facultad de Pedagogía VI: el simulacro de evacuación

Capítulo VII. Un alien en la Facultad de Pedagogía VII: el día en el que se fue la luz

Si os apetece seguir las aventuras de TORREZNO 3PO y estar al tanto de sus nuevas aventuras, lo podéis hacer por X (enlace), por la página de Facebook (enlace), suscribiéndoos a este blog. También por Telegram (enlace) o por el canal de WhatsApp (enlace). Espero que os lo estéis pasando tan bien como me lo estoy pasando yo escribiendo. Y sí… podéis hacer sugerencias acerca de qué queréis que visite vuestro/mi alienígena pedagógico favorito.


Descubre más desde XarxaTIC

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.