Pues si buscáis respuesta a la pregunta a este post, salvo intuiciones sesgadas y nada objetivas, debo comentaros que no tengo ni idea. Pero el problema no es que yo no tenga ni idea. El problema es que nadie se ha atrevido, al igual que sucede con los planes de digitalización e incorporación de tecnología en los centros educativos, a evaluar ese aspecto.
No me vale como dato que existan más titulados universitarios. Que haya un mayor número de titulados superiores no implica que sepan más. Pueden haber obtenido el título con una menor exigencia y, por ello podríamos decir que ese incremento de titulación lleva aparejada una disminución de aprendizajes del alumnado. Yo no lo sé. Repito, soy muy subjetivo y puedo dar una opinión por lo que veo del tema. Nada más que eso.
Lo mismos con las titulaciones de FP. Hay muchísimos más titulados de FP y mucho menor abandono de esos estudios que antes pero, ¿implica lo anterior que estemos sacando mejores titulados en ese tipo de estudios? O, como en el caso anterior, ¿no estaremos bajando el nivel para que puedan titular la mayoría?
Los títulos de la ESO los estamos regalando a parte del alumnado. De eso no hay ninguna duda. Hay alumnado sin saber realizar operaciones básicas y redactar un texto sin faltas al que se le da el título de la ESO. Esa reducción del abandono escolar que nos venden tanto, por lo visto, son solo un maquillaje cara a la Unión Europea. No olvidemos que fue entrar en la UE y empezar a reducirse el abandono escolar. ¿Antes eran más tontos? ¿Ahora son más listos? ¿Tenemos mejores profesores en las aulas que los que tuvimos nosotros? Hay muchas preguntas que sabemos que nos darían un «no» por respuesta pero, por desgracia, a nadie le interesa evaluar ni contrastar aprendizajes de una forma seria.
Yo pondría la mano en el fuego acerca de que las capacidades del alumnado actual son iguales que las del alumnado de hace, por ejemplo, treinta años. También tengo claro que habría un porcentaje de alumnado que, con los criterios de hace treinta años, no se sacaría ni tan solo el Graduado Escolar. ¿Por qué? ¿Aprendían más antes que ahora? ¿Por qué se evaluaba de otra manera? ¿Por falta de presión externa por parte de la administración para aprobar más? ¿Por mayor presión por parte de las familias? ¿Será que los profesores queremos menos problemas y por tanto aprobamos a casi todo el mundo? Hay muchas casuísticas para darse esa mejora en los resultados oficiales. E insisto, los resultados oficiales no implican que se aprenda más.
Es que lo más triste es que ni tan solo podemos usar el PIAAC (una prueba de PISA que mide las competencias entre la población entre 16 y 65 años) porque no podemos evaluar aprendizajes con la misma prueba en personas de diferentes edades. Con los años se van cogiendo recursos y experiencia. Y eso desvirtúa cualquier resultado de este tipo de pruebas. Pruebas que, haciendo un inciso, me permito decir que solo sirven para que algunos saquen pasta y la OCDE pueda seguir manipulando la educación en gran parte del mundo a su manera. Es tan fácil hacer pruebas para conseguir los resultados que uno quiera. Solo hace falta ver qué hacen algunos docentes de esos tan innovadores: abogan por la desaparición de cualquier tipo de prueba externa, como la Selectividad, para que no se les note el desastre que supone para su alumnado la aplicación de determinadas prácticas con su alumnado.
¿Ha caído el nivel educativo en España? Va, voy a mojarme (con todos los límites que queráis poner y que yo también he puesto al principio). Mi intuición, totalmente cuestionable y subjetiva, me dice que se está dando una caída de aprendizajes de nuestro alumnado de forma general. Y cuando hablo de forma general, me voy a permitir matizar un poco. El alumnado excelente (que ya lo hubiera sido antes) puede llegar a los mismos aprendizajes. El alumnado, normalmente con situación sociofamiliar muy compleja, sigue sin ser capaz de añadir aprendizajes importantes y determinantes respecto a los aprendizajes que ese mismo tipo de alumnado tenía hace décadas. Lo que pasa es que ahora muchos acaban titulando la ESO cuando antes había mucho abandono a los catorce. Quizás sea por la multitud de vías de regalo de títulos. Sí, no nos rasguemos las vestiduras: las adaptaciones curriculares, los PMARes, la FP Básica, el PAC o todos los grupos de diversificación que existen bajo diferentes epígrafes en nuestro territorio, permiten un camino muy sencillo para poder dar la ESO sin asumir unos aprendizajes mínimos.
Vamos camino de la devaluación de las titulaciones porque, por desgracia, el modelo americano, de Universidades donde solo tiene interés que su alumnado sea bueno en algún deporte, como hemos visto tantas veces en las películas, se está implantando de forma encubierta. Además la proliferación de centros privados hace que los centros públicos, para conseguir mantener a su alumnado, al que le interesa solo la obtención DEL PAPEL, tiene que reducir aprendizajes y evaluar abriendo mucho más la mano. Hoy sería inaudito que en una Universidad española se aprobara en primera convocatoria, como me sucedió en una asignatura de mi Facultad, a cuatro alumnos de ciento veinte. El profesor sería denunciado y, posiblemente amonestado por parte de sus superiores. Y esto es un problema. No por el hecho de no tener que plantearse cuál es el motivo por el que solo aprobasen cuatro alumnos. Sí por el hecho de que la presión externa obligue a hacer las cosas de otra manera. No sé si me explico.
¿Estamos beneficiando a la sociedad manipulando en positivo los resultados académicos de nuestro alumnado? ¿Beneficia a la sociedad que se expidan títulos como churros? ¿A quién le interesa no evaluar el aprendizaje de nuestro alumnado? Va, seamos sinceros. Quizás también la culpa sea en parte nuestra (como profesorado) ya que, al final, lo que queremos es vivir tranquilos y, en ocasiones aprobamos al alumnado siempre pensando que no vamos a ser el cortapisas de la hostia que ya se encargaran otros que se pegue. O, como en el caso de centros privados, le aprobamos en función del dinero que vayamos a sacar con ese cliente. Recordémoslo, en el momento en el que alguien paga por un servicio privado, deja de ser usuario para convertirse en cliente. Pero, dejadme insistir, no es un tema de público y privado ya que los aprobados y el hinchar notas de Bachillerato pasa en todo tipo de centros educativos.
Yo pido desde aquí una evaluación de todo el sistema educativo. Y dentro de dicha evaluación, la existencia de unos criterios claros acerca de qué debe aprender nuestro alumnado y cómo podemos evaluar, lo más objetivamente posible, ese cumplimiento de los aprendizajes. No me vengáis con competencias. Estoy hablando de aprendizajes. Las competencias y habilidades son algo que, por desgracia nos han colado pero, al final lo que importa es lo que un alumno sepa. Porque si sabe, ya será competente y tendrá facilidad de adquirir las habilidades en su uso. Lógica incuestionable. Salvo, claro está, para algunos que, curiosamente, jamás quieren una evaluación objetiva de su trabajo. O de lo que venden desde determinados púlpitos. O de lo que legislan desde determinados despachos. Aquí lo que toca es evaluarlo todo. Y hacerlo bien.
Cuando tengamos evaluaciones serias podremos comparar. Hasta entonces, ya os digo yo que estoy convencido de que estamos regalando aprobados y títulos por encima de nuestras posibilidades. Otro tema es que el nivel educativo, de forma global, haya caído. Tendremos los mismos alumnos buenos y malos que antes. Con la diferencia que los segundos ahora van a conseguir, en muchos casos, titular.
Finalmente un pequeño matiz. No estoy defendiendo incrementar la dureza de los estudios ni facilitar repeticiones. Estoy hablando de otra cosa. Pero bueno, habrá quien no lo entienda. Algo en lo que, por desgracia, poco puedo hacer. Eso sí, lo que no me podréis cuestionar es que, partiendo de la premisa que el alumnado de ahora no es más listo ni tonto que el de antaño, actualmente hay menos abandono escolar y más titulaciones en todas las etapas educativas (tanto obligatorias como postobligatorias). Y para que eso suceda solo hay una explicación posible.
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Aparte del paupérrimo nivel educativo español podemos encontrarnos con escasez de modales incluyendo al profesorado, que puede estar involucrado en casos de bullying a sus propios alumnos. Esto en efecto reúne las características de una distopía en un país al que cada vez más se le van rompiendo las costuras de supuesta democracia si es que alguna vez llegó a alcanzar algo parecido.
El laissez faire en los centros educativos, propiciado por la administración y algunos equipos directivos, es de traca. La política del «no involucrarse» o «de que todo se soluciona con besos y abrazos» está expandiéndose muy rápidamente.
Mi hija está en primaria, es vergonzoso lo que le están haciendo a la educación, cada vez tengo más claro que quieren crear generaciones de idiotas.
Por ejemplo, los libros de matemáticas de segundo de primaria son basura, con ejercicios en los que la mitad hay que colorear y dibujar. Cuando yo era pequeño en 1º ya estábamos introduciéndonos en las multiplicaciones. Ahora hasta 3º ni saben de que va eso, los padres hemos de rebelarnos y enseñarles en casa si no podemos permitirnos una escuela privada, que es donde la chusma política lleva a sus hijos.
Las estadísticas sobre fracaso escolar están más que falseadas, a base de bajar el nivel claro que mejoran los números… Cualquiera que colabore con esto es cómplice de un crimen
El fracaso escolar simplemente incluye a alumnado que repite o que no supera determinadas asignaturas. No mide el aprendizaje recibido. Algo que permite realizar una manipulación completa del sistema y vender lo que no es.
El gran problema de bajar los niveles académicos para conseguir muchos aprobados es que los buenos alumnos no se esfuerzan ni se preparan. A mi, que soy profesor, no me importa que se facilite la titulación por abajo, pero me preocupa que se pierda esfuerzo y preparación por arriba
Se están regalando titulaciones. Los niveles universitarios han descendido a niveles de que graduados en construcción civil tienen problemas para usar el CAD, pero aún muchos más problemas para aprender por sí mismos algo relacionado con los mismos pero que no han cursado en sus estudios, como si el mundo fuese estático. Los de la educación secundaria están en las Mismas. Chavales que salen del instituto sin saber poner los principales ríos y capitales mundiales, ni tan si quiera vagamente en el mapa. Chavales que no conocen la historia. Y no hablo de nombres de reyes, hablo de hechos que a día de hoy marcan sus vidas. Chavales que están al borde del analfabetismo funcional, es decir, que articulan lo que leen, pero que si el texto es un poco complejo, no lo entienden, o chavales que tienen dificultades para saber que si una docena de huevos cuesta 2€ y quieren saber el precio por huevo, se pierden intentando saber si el divisor son los 2€ o los 12 huevos. En general, los niveles de los docentes cae respecto a los de generaciones anteriores, porque hoy en día muchos licenciados, o graduados acceden, sin tan siquiera el esfuerzo de opositar, a unas plazas de docente que laboralmente son mucho mejores que las de sus salidas laborales originales. Y sí, es que es mucho más fácil, siendo ingeniero, acceder a un puesto vitalicio de docente sin tan si quiera opositar, para tener 90 días de vacaciones y jornadas laborales de 5 horas en el centro, en donde si eres buen o mal docente vas a, no solo mantener tu puesto, si no a mejorarlo, al menos cada tres años, independientemente de tu aptitud o ineptitud como educador. Trabajar de ingeniero, con una presión extrema y resolviendo problemas complejos a diario, te va a dejar cobrando, y en el limbo de no saber qué continuidad puede tener tu puesto de trabajo unos míseros 1300-1600€ al mes. Obviamente el modelo estatal NO premia el esfuerzo ni del alumno, ni del docente. Éstos ya son recompensados, por el simple hecho de «ser o estar» y esto, tarde o temprano nos abocará al desastre. Esto genera desigualdad entre los respetables, y cada vez más pocos docentes que tienen el ánimo y la vocación de enseñar, que al final acabarán abandonando tal esfuerzo, porque sus compañeros los mirarán mal al trabajar correctamente y se notará mucho su estatismo y poca dedicación, y genera frustación entre los alumnos, que cuando se enfrenten a la vida real, si no se meten a vivir del erario público, generarán enormes frustaciones cuando no puedan conseguir fácilmente lo que se han planteado conseguir…A la porra la cultura del esfuerzo!
Más claro imposible. Mi generación (1979) ya me parecía petada de gente ignorante, imaginad como está el patio a día de hoy. Tengo família en el mundo de la Educación y siempre me dicen que no imaginamos como está la cosa. Lo peor de todo es que a todos estos nos los comeremos como sociedad (imagina ir al médico y que te atienda uno al que le quedaron la mitad de las asignaturas en secundaria, o, peor aún, en estudios superiores). No somos conscientes del daño que estamos perpetuando, esto tiene y tendrá gravísimas consecuencias a nivel social. Qué podemos esperar de chavales sin valores que solo buscan vivir la vida intensamente sin esforzarse?
Que no nos pase nada y si no, al tiempo.
«Hoy sería inaudito que en una Universidad española se aprobara en primera convocatoria, como me sucedió en una asignatura de mi Facultad, a cuatro alumnos de ciento veinte. El profesor sería denunciado y, posiblemente amonestado por parte de sus superiores»
Pásate por alguna escuela de ingeniería y nos cuentas. Varias asignaturas por curso (por regla general 2 o 3) van en esa tónica.
Hay profesores cuya fama (o ego) radica precisamente en este hecho («cuantos mas caigan, mas grande soy»).
Ojo, que muchas veces, el listón está donde tiene que estar para que el dominio de la materia en cuestión sea el que debe ser.
Pero desafortunadamente, otras veces es cuestión de ego, de saber que estás «puteando» sin motivo objetivo alguno a tu alumnado para alimentar tu fama.
Creo que no estoy defendiendo en mi artículo esas «escabechinas». Estoy diciendo de poner la lógica y poder conocer la realidad de la evolución de los aprendizajes. Algo que tiene muy poco que ver con las titulaciones. Un saludo.
Yo secundo todas las palabras del primer comentarista. Como docente que ha impartido FP básica, a pesar del enorme esfuerzo que supone el comportamiento de este alumnado, si de 15 alumnos titulan 6, lo doy por bueno. Estos 6 alumnos, en otro caso, pasarían a formar parte de los parias de la sociedad, que no poseen ni la ESO y estarán abocados a trabajar en el campo o similares.
Profesor de Eso desde hace 40 años??? Ya empezamos hablando con poca propiedad. La ESO NO tiene 40 años y tú estarías jubilado. Yo SI estoy de acuerdo, hemos bajado el esfuerzo, el indice de suspensos, y regalado titulitos para justificar las 20 reformas y contrarreformas realizadas por la mierda de políticos de colores contrarios que hemos votado.
(Con sus adláteres correspondientes de educación) Para justificar también la recua de iluminados con las maravillosas propuestas y contrapropuestas de educación y los profes megainnovadores. Para que no nos pintaran la cara en Europa con los índices de abandono y nuestra población de camareros y albañiles. No hay nada que más le cueste al ser humano que reconocer el fracaso y antes eso lo oculto diciendo que los nenes aprueban. Seguid seguid, pero luego enlazamos con los problemas de respeto en los centros y las bajas por depresión de los profes.
Entiendo que cuando usted va al médico va a preferir que le atienda un médico con el MIR (que al paso al que vamos también lo regalarán en unos años) que un médico sin él, igual que cuando lleva su coche al mecánico va a preferir un mecánico que se esfuerce en identificar y reparar problemas, que no en «si no encuentro el problema, cambiamos todo, total lo paga el cliente…»…. Pues no dejar en la calle a gente que no sirve para estudiar es malísimo ya que titulamos a gente poco motivada y poco competente en ese campo. Por cierto, usted cada día come productos salidos «del campo o similares», y sabe qué? Como todo en esta vida, los buenos agricultores, con esfuerzo, tienen una vida digna o incluso mejor de la que pueda tener cualquier trabajador. Parece que a usted le parezca horrible trabajar en el campo, pero bien que come de él…
No se está hablando de títulos. Se está hablando de aprendizajes. ¿Ha mejorado o ha empeorado el aprendizaje del alumnado? Esa es la clave. Lo de los títulos, al igual que la tasa de abandono escolar, no tiene ninguna relación con lo planteado.
Yo también he dado FP Básica y grupos Integra (de prevención del abandono escolar). Algo conozco de su funcionamiento y de las adaptaciones que se está dando en esos grupos para que “no se nos pierdan”. Otra cuestión muy diferente es si enmascarar aprendizajes bajo titulaciones es positivo o no para ellos. O para la sociedad en su conjunto.
Por cierto, ¿qué hay de malo en trabajar en el campo?
Un saludo.
Soy profesor de ESO desde hace casi 40 años y esa atrevida afirmación de que se regalan los títulos es una ofensa a la sociedad, a la profesionalidad del personal docente y, por supuesto al alumnado y sus familias. En la época, en donde salen más titulados que nunca en la historia de España este tipo de afirmaciones me resultan inquietantes y peligrosas por el mensaje que se está dando, No confundamos regalar con adaptar, No confundamos ESO con Bachillerato y no confundamos a alumnado de clases privilegiadas y con acceso a todo tipo de materiales y medios y profesores particulares, etc., con alumnado de clases bajas a los que se les adapta el currículo para que puedan titular y al menos acceder a la FP de grado medio. He sido profesor de los programas de diversificación curricular que han sido exitosos a todas luces y me enorgullece haber sacado adelante a alumnado sin medios económicos… El mundo de la educación es muy complejo y realizar ese tipo de afirmaciones al tun tun es una temeridad. Para opinar así hay que informarse adecuadamente y estar dentro, por ejemplo, de las sesiones de evaluación de los centros para hablar con propiedad.
De la lectura deduzco que quien escribe está dentro del sistema y sabe de lo que habla. Cuando usted habla de adaptar el currículo para que puedan titular y hacer FP, ¿a qué se refiere exactamente? Esa adaptación, ¿no supone renunciar a que el alumnado adquiera determinados conocimientos, por secundarios que los consideremos? Cómo profesor universitario puedo afirmar sin miedo a equivocarme que, en términos generales, el alumnado tiene menos nivel que hace 20 años y que el nivel de exigencia ha bajado.
Buenas tardes, no estoy de acuerdo con la totalidad de sus afirmaciones. Soy maestro y tutor desde hace casi 20 años y veo como la educación ha perdido casi por completo valores como el esfuerzo, la constancia y la motivación interna por mejorar, debido a las directrices y orientación actual que marca el currículo. Se hacen adaptaciones con la finalidad de aprobar a la totalidad del alumnado, propiciando de esta manera que el mismo no haga esfuerzo por aprobar ni aprender; saben que de entrada ya tienen el PA (progresa adecuadamente) y que la evaluación escasamente valora el conocimiento ni los contenidos.
Adaptar es un eufemismo de bajar el nivel, y de ahí viene el regalo. Ese buenísimo que intentas desprender en tus palabras hablando del alumnado de «clases bajas» es justo el problema y la raíz de los regalos. Tú comentario solo confirma punto por punto todo el artículo. Respondo a Juan el profesor de la ESO con 40 años en la enseñanza.
Hola Juan. Tan solo un pequeño matiz. Las primeras generaciones de la LOGSE empezaron de forma generalizada a partir de tercero de ESO hace unos veinticinco años. Por tanto es difícil que hayas sido profesor de la ESO desde hace 40 años. Y, por cierto, el artículo va de aprendizajes, no de títulos. De lo que significa ese título y si el mismo se da con los aprendizajes adecuados para su obtención.
El tema que comentas de la tipología de alumnado y de las ayudas que deben darse al más desfavorecido no tiene nada que ver con lo que se plantea.
Un detalle, llevo más de veinticinco años en docencia. Empecé dando clase en la antigua FP, posteriormente en otros ciclos formativos (ya adaptados a la LOGSE) y, finalmente, estoy de profesor de Tecnología desde hace casi veinte años. Creo que he estado en algunas sesiones de evaluación. 😉
Saludos.