15+1 puntos para ser un malote de la escuela del siglo XXI

Hoy he publicado un vídeo acerca de los 15+1 puntos que, para mí, hacen que uno sea un malote en la escuela del siglo XXI y pueda ser considerado un furibundo antipedagogista, un rancio o, simplemente, un profesaurio. Me ahorro el resto de calificativos porque, por lo visto, de argumentos algunos tienen pocos, pero de adjetivos para referirse a los «enemigos de su luz» disponen de una bonita retahíla de calificativos.

Si preferís tener los puntos ordenados, porque os aburre ver el vídeo o no he vocalizado lo suficiente, os los pongo a continuación:

Uno es lo peor para la escuela del siglo XXI si hace lo siguiente:

1. Cuestionar el reparto indiscriminado de tecnología.
2. Cuestionar el modelo de competencias.
3. Cuestionar que no puede hacerse nada sin saber previamente qué se debe hacer.
4. Tener un principio de precaución acerca de las modas educativas.
5. Cuestionar la universalización del aprendizaje vía cursos masivos, y apostar por los grupos pequeños y la personalización.
6. Creer en que hay cosas que van antes que otras.
7. Plantearse quién dice las cosas e investigar/leer un poco antes de asumirlas como algo útil en educación.
8. Creer en el trabajo que hay antes de conseguir nada.
9. Plantearse que la escuela de las emociones y de la magia es un bluf.
10. Creer en una memoria sana.
11. Saber que no existe la escuela de los Reyes Godos.
12. Creer en la valía profesional de tus compañeros.
13. Cuestionar la vocación docente. Saber que esto es un trabajo.
14. Plantearse qué intereses subyacen tras ciertas cosas e investigar quién está vendiendo qué.
15. Cuestionar todo lo que se vende bajo el concepto de “innovación educativa” y a la mayoría de charlatanes a los que, por desgracia, se da voz.

Y, finalmente, el punto más importante por el que uno realmente es malo malote en la escuela del siglo XXI es pensar en el alumnado y no en qué puedo vender (o cómo venderme y sacar tajada).

Por cierto, aprovecho para deciros que os suscribáis a mi canal de YouTube. El chalet en las Maldivas (iba a poner Malvinas pero por suerte he rectificado a tiempo) no se hace solo.