En los últimos tiempos intento, aunque sé que es imposible al cien por cien, aislarme de valoraciones inmediatas cuando procedo a la lectura de una determinada información sobre educación publicada en un medio o, simplemente, que me llega por las redes sociales. También poco en barbecho siempre cualquier noticia que pueda llegarme por terceros o, simplemente, previa a cualquier tipo de contraste. Ya no digamos lo que hago cuando veo un determinado titular capcioso o amarillista relacionado con la educación. Y de estos últimos, por desgracia, hay demasiados últimamente.

Es por ello que me apetece compartir con vosotros un decálogo, escrito a vuelapluma en otra de esas noches de insomnio (¡ya no recuerdo cuándo me podía levantar habitualmente después de las cinco de la mañana!), para poder valorar una noticia relacionada con la educación y no caer en las trampas que suelen tender las mismas. Así pues, por si os interesa, aquí va.

Un inciso. Sé que podría hacer una lista numerada o una infografía pero, sinceramente, abrir ahora el Canva para ponerme a hacer una infografía molona o poner un número antes de cada uno de los puntos del decálogo me da pereza. Bueno, me da más pereza abrir el Canva. Especialmente cuando hoy tiene que ser un día en el que hay cosas relacionadas con el diseño que van a formar parte de mi sábado. Ya sería abusar.

Bueno, sin más preámbulos (que ya sabéis que me gusta dar demasiadas vueltas a las cosas) vamos con ese decálogo.

En primer lugar, lo que deberíamos hacer siempre es verificar la fuente. Antes de dar por válido algo, preguntaos de dónde viene la noticia, qué medio la publica o, simplemente si se trata de algo que ha dicho alguien en las redes sociales. Esto está muy relacionado con el segundo punto del decálogo: el de corroborar la información. Ni se os ocurra confiar en una sola fuente por mucho que la misma diga lo que queréis oír. Yo siempre pongo en este caso el mismo ejemplo. Imaginad que os llega un rumor por el cual os dicen que vuestro compañero jovencito de Educación Física y la catedrática de Matemáticas, una persona ya cercana a la jubilación, tienen una relación porque los han visto muy acarameladitos en una sesión de cine mirando la reposición de Titanic. Intentad buscar a alguien más que os lo confirme porque ya sabéis qué pasa con estos rumores. Que el 90% se demuestran que no son verdad o que, simplemente, no os lo han dicho pero la de Matemáticas es la madre del de Educación Física. Así pues, intentad no quedaros con una sola fuente.

También es importante saber en qué contexto se produce la noticia. Una noticia descontextualizada puede llevar a interpretaciones erróneas. Siempre he defendido que no es lo mismo una afirmación en educación procedente de un determinado centro que de otro. Y, en ocasiones, esto va muy relacionado con la generalización. A veces se aísla el contexto y se intenta dar la noticia como algo habitual. Pasa. No me digáis que nunca os ha pasado, tanto por vuestra parte el generalizar cuando la compartís, como por parte de quién os ha llegado el mensaje.

Otra cosa que también debéis analizar es el lenguaje de la noticia. Un lenguaje sensacionalista o que apele a las emociones suele ser un indicador de falta de objetividad. Todos los titulares de los medios son tendenciosos. Es por ello que jamás os debéis quedar en los mismos. En ocasiones he publicado algún titular un poco «raruno» en este blog que, en ocasiones poco tenía que ver con lo que ha acabado siendo el post, y más de uno se ha quedado con él.

Por cierto, ¿qué intención tiene la noticia? ¿Informar, opinar o persuadir? Si la noticia o la información va encaminada a la persuasión, ya podéis descartarla de facto. En caso de ser informar, también debéis aplicar los criterios anteriores y ver si la misma aparece en otros medios. Un detalle importante… hoy en día hay bulos que se difunden de forma muy rápida en varios medios y, normalmente, la rectificación ocupa menos espacio que la noticia falsa. Es por ello que debemos ir con mucho cuidado antes de aceptar nada de forma acrítica.

Mirad la fecha y el lugar en el que se produce la noticia. Hay veces que algunos tiran de noticias pasadas para decir que están pasando ahora. Y ya no digo de lugares que nada tienen que ver con lo que está pasando en la educación en nuestro país. Así que, si veis una noticia, informaos bien de cuándo y dónde ha pasado. A veces hay interés en retomar determinadas noticias dentro de los debates cansinos que se dan sobre temas educativos dando la sensación de que es algo que ha pasado ahora. Hay mucho fullero de noticias. Demasiado.

Evaluad la profundidad de lo que os llegue. Una buena noticia educativa, bien fundamentada, debe ofrecer un análisis profundo y no solo datos superficiales. Lo sé. Las redes sociales molan porque se pueden decir barbaridades sin necesidad de aportar ninguna prueba pero, por favor, entended que lo anterior es muy poco serio y que si se publica una foto de alguien abriendo un incunable con una foto de El Lazarillo de Tormes generada por inteligencia artificial, es que algo falla. Lo sé. Este no es el punto donde comentar esto, pero me ha venido un flash.

Olvidaos del emisor. No dejéis que la ideología os influya en vuestro juicio acerca de una noticia o una decisión educativa. Es importante evaluar el contenido por sí mismo más allá de si os gusta o no el periodista o el medio en el cual se publique. También sucede en las redes sociales. Olvidaos de si algo lo dice un miembro del colectivo A, B o el tipo aquel que pasaba por ahí. La noticia, la investigación o la evidencia, bien asociada a su fuente, es la clave. Más allá de que la noticia venga de los tuyos, de los otros o de los que eran de los otros, ahora son de los tuyos y mañana, quizás, sean de los otros que ya vuelven a dejar de pensar en bloque monolítico como tú. Es que lo de tener un planteamiento educativo monolítico sin fisuras se las trae. Pero este no es el objetivo de este decálogo.

Identificad al público objetivo. No es lo mismo una noticia que se da para profesionales de la educación como para legos en el asunto. Es por ello que la manera de enfocar su lectura debe ser diferente. En ocasiones pretendemos que una entrevista destinada al público en general incida en cuestiones muy profesionales y específicas pero, al final, lo que quieren los medios es informar al mayor grupo de personas posibles. Por eso se adaptan a ese público objetivo que le hace aumentar las métricas. Y lo hacen, tanto mediante el uso de un lenguaje muy poco técnico como acudiendo al titular del clickbait que, curiosamente, acostumbra a resaltar frases que, descontextualizadas, ya generan el debate bronco que se traslada a las redes sociales.

Y, the last one (¡a ver si va a ser que solo los guais pueden usar anglicismos!) es usar el pensamiento crítico. No os quedéis con la primera impresión que os genere una noticia. Analizad, cuestionad y formaos vuestra propia opinión basada en evidencias. Si os dicen que la Ministra de Educación en El Mundo Today es un alien que ha venido de Ganímedes, por favor, contrastad el medio por el que os llega esa noticia y revisad, a nivel astronómico, qué es Ganímedes. Va, os adelanto que es uno de los satélites de Júpiter. Algo que he podido contrastar de manera muy sencilla. El tema de lo de que sea un alien o no ya es harina de otro cantar, pero tened en cuenta que, con las evidencias que tenemos en la actualidad, lo más probable es que no lo sea. Yo me apuesto una paella a que no lo es. ¿Aceptáis?

La difusión masiva de una noticia sobre educación no hace que sea más cierta. Y sé, tal y como me ha pasado en alguna ocasión, que es muy fácil darle al «compartir» o al «me gusta» sin habérsela leído porque cuadra con la noticia que nos gustaría que fuera cierta.

Disfrutad del sábado. Yo voy a seguir con lo mío. Eso sí, después del segundo café del día. Bueno, el primero porque, por desgracia, la cafetera se ha empeñado en no quererme al primer intento. Una noticia que, puede ser verdad o no pero que no se puede validar por nadie más que por mí o por las dos cortapichas que me han venido con la verdura del huerto de mi suegro.

Donar

  Nuevo canal de WhatsApp

También tenéis la posibilidad descargaros mis libros en formato digital a partir de cero euros desde aquí. Y recordad que suscribirse al canal de WhatsApp no implica compartir vuestro número de teléfono. Solo implica que vais a poder recibir y consultar todos los artículos que publico en este blog por ahí.

Descubre más desde XarxaTIC

Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.