Sois basura. Los partidos de gobierno de todos los ayuntamientos que estáis corriendo a instalar elementos de refrigeración para el día de mañana, jornada electoral en nuestro país, sois basura. Lo estáis haciendo desde partidos rojos, azules, rosas, naranjas o verdes y resto de tonalidades. Por tanto, la basura no tiene color. Simplemente, hiede.

Mi mujer acaba de estar de tribunal de oposiciones, en aulas a más de treinta grados sin que ni uno de vosotros, políticos de mierda, haya tenido a bien poner ningún elemento de refrigeración ni darles ninguna botella de agua fresca, ni a los miembros del tribunal ni a los opositores. Ya no entro en los pobres niños que, en los meses de septiembre, mayo y junio, se están asando en sus aulas, maravillosamente dotadas de CERO elementos de refrigeración. ¿Por qué no pensáis en ellos? ¿Qué es lo que os importa? ¿Vuestra maravillosa fiesta de la democracia en la que vais a conseguir sillones, dinero y poder para hacer lo que os dé la gana con los ciudadanos? Esto no funciona así. Es más importante el procomún. Y el procomún hace que sea mucho más importante poner elementos de refrigeración estables en los centros educativos que hacerlo solo para un día. Sí, sé que en ese día os jugáis mucho, pero la sociedad se juega mucho más con lo que sucede cada día en esos centros educativos.

Cuando dicen que no todos los políticos son iguales, tienen toda la razón. Cuando dicen que no todos los partidos son iguales, ahí yo ya discrepo profundamente. Las aberraciones, como estas de correr para poner sistemas de refrigeración, subirse el sueldo una vez se consigue la alcaldía o, simplemente, ponerse a barrer las calles y quitar las pintadas de las paredes, porque se organizan unos Juegos Olímpicos, una Exposición Universal, viene el Papa o, simplemente, vienen elecciones aunque a lo largo de cuatro años se hayan estado tocando las partes, es algo que han hecho unos y otros.

Hoy me han tocado muchísimo las partes. Me las tocan cuando hacen chapuzas legislativas que, por desgracia, afectan a la mayoría de ciudadanos a peor. Y sí, no voy a negaros, que si me afectan a mí personalmente o a mi familia, me joden muchísimo más. Es imposible aislarse de lo que te afecta de forma más cercana. Pero esta última desfachatez, con el montaje de estos sistemas de refrigeración, cuando han pasado del alumnado y del profesorado, además de todo el personal que trabaja en esos centros, como de la mierda a lo largo de décadas y ahora, por haber convocado elecciones a finales de julio, unos y otros se encargan de correr para hacer lo que jamás había hecho, me da arcadas.

Siento el tono. Tengo muy claro quién es el mal político. Y no, no es el que me decís en las redes sociales o en los medios, de uno u otro color, que son los malos. Tampoco es el que, trabajando mucho, a pesar de serlo, intenta hacer las cosas bien para todo el mundo. Lo son los que me toman el pelo y hacen estas cosas. Yo espero que en las próximas municipales os acordéis de lo que se ha hecho en vuestro ayuntamiento. En el mío, por ejemplo la primera decisión tomada fue la de subirse el sueldo el alcalde y los concejales con dedicación exclusiva (enlace). La segunda, reunirse con una promotora que, de forma (supuestamente) ilegal, ha vallado terreno público dictaminado por los juzgados como si tuviera que negociarse algo en lugar de enviar a la policía a quitar las vallas y meter un multazo a dicha empresa. Por suerte no le voté. Me hubiera arrepentido toda la vida.

¿Son todos los políticos iguales? No. ¿Son los políticos de un determinado color político buenos o malos en bloque? No. Son basura esos que pasan olímpicamente de la ciudadanía, pensando solo en cuánto dinero van a poderse repartir. Y, por desgracia, viendo la cantidad de ayuntamientos que están refrigerando los centros educativos ahora, cuando han pasado de todos lo que están ahí a lo largo de todo el año, son más de los que me gustaría que fueran.

Os pido disculpas pero, o lo escribo o reviento. Y dejarse la rabia dentro es lo peor. Me da igual que mañana sean elecciones. Esto es mi blog y escribo, cuando me da la gana, de lo que me apetece. Y hoy me apetecía desahogarme.

Lo más importante del blog es que os paséis por aquí, pero si queréis colaborar en su mantenimiento o haceros mecenas del mismo…


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