Es fantástico ver que un libro que escribes tiene tan buena acogida entre la gente. Especialmente cuando le has puesto mucho cariño en su redacción. Es, como he dicho a aquellos que me conocen, el primer libro que he escrito que no es un refrito de artículos de este blog. Y esto hace que, al menos para mí, sea en realidad el primer libro que escribo.

El otro día me pasaron una captura de Amazon en la que, por lo visto, el libro estaba entre los veinticinco más vendidos de la categoría “Educación” en formato ebook. Y mola. Más que oír de nuevo la canción de Rosalía al pasar un coche, con la música a tope, desde la terraza.

Fuente: Amazon

Me hace mucha ilusión saber que un libro, sin promoción por terceros ni publicitado por todo el engranaje mediático que tienen determinados autores, esté dándome estas alegrías. Me hace especial ilusión también que el libro más “poco inclusivo” esté por encima de un libro acerca de “educación inclusiva”. Permitidme esta pequeña maldad. Lo he hecho por hacer una gracia de esas que, por desgracia, algunos nunca van a entender.

Mi objetivo, como ya he dicho en varias ocasiones desde que lo estoy perpetrando o desde que ya está publicado, es conseguir que sea el libro más vendido sobre educación en el curso que empieza en nada. Demasiado pronto para los docentes vacacionales como yo. Estoy teniendo muy buen verano, rodeado de gente fantástica y con tiempo para disfrutar de muchas cosas que, a lo largo del curso, no puedo hacer. Y eso me está haciendo disfrutar mucho. Al igual que espero que lo estéis haciendo los que os pasáis por aquí.

Muchas gracias a todos los que estáis confiando en mis habilidades literarias. Os prometo que el lenguaje vulgar y soez sobre el que se sustenta todo el libro, al menos en mi cabeza, tenía todo el sentido del mundo.

Y de nuevo, un poco más de publicidad acerca de dónde encontrar mi nuevo libro.

Si estoy siendo un poco pesado espero que me disculpéis, pero os garantizo que lo hago sin ninguna mala intención. Lo hago porque me hace muy feliz saber que hay personas a las que les interesa lo que escribo. Lo sé. Hay personas que les interesa para bien y otras para mal. Pero bueno, no se puede contentar a todo el mundo. Y eso es algo que, con los años, he ido aprendiendo y relativizando.

A propósito, a ver si os animáis los que lo habéis adquirido, después de haberlo leído, a dejar una pequeña reseña, o bien en la multinacional de turno o, infinitamente mejor, en la página que hay en el blog sobre el libro.

Finalmente, un detalle: no es un libro para regalar. Es un libro para adquirir individualmente y para leer en la intimidad… siempre y cuando no haya cosas más interesantes que hacer. 😉


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